Marsha Collier ha escrito muchos de los libros de la serie "Para Dummies" sobre tecnología, así como libros superventas sobre redes sociales y atención al cliente. Es justo decir que sabe algo de comunicación y tecnología. Por eso, cuando pide más "comunicadores de datos", como hizo en un acto reciente en Londres, merece la pena escucharla. ¿Qué es un "comunicador de datos"? Es alguien capaz de convertir estadísticas en historias. Alguien que sabe encontrar el significado de las cifras y compartirlo de forma convincente, ya sea con palabras o imágenes. ¿Por qué necesitamos más comunicadores de datos? Porque ahora disponemos de más datos que nunca. Por primera vez, tenemos la oportunidad de eliminar muchas conjeturas de las decisiones empresariales y respaldar nuestros instintos con pruebas. Ya sea para determinar la estrategia de marketing adecuada, detectar tendencias de ventas tempranas, analizar los puntos débiles de la cadena de suministro u optimizar la eficiencia de la fabricación, ahora podemos tomar mejores decisiones basándonos en información en tiempo real. Pero sólo si contamos con personas capacitadas para desmenuzar los datos y ver las historias que encierran. Entonces, ¿dónde encontramos a esas personas? Sólo hay una función en la empresa en la que abundan los comunicadores de datos potenciales. Y es una función que debería crecer en consecuencia. Es la oficina de finanzas. Si se les libera para que se centren en estos retos estratégicos, los equipos financieros tienen el comienzo de las habilidades adecuadas. Y deberían disponer de las herramientas adecuadas. Las herramientas de BI y CPM como Prophix son más asequibles y accesibles que nunca, con interfaces intuitivas y atractivas que ayudan a dar sentido a los datos. Viven en la nube, eliminando el dolor de cabeza de TI. Y aportan el poder de la IA para aumentar las capacidades del usuario y automatizar tareas que antes eran manuales. En 2020, los equipos financieros podrán aportar más valor que nunca a toda la empresa, respondiendo a preguntas que van mucho más allá de la oficina de finanzas. La oficina de finanzas debería ser la parte más emocionante de la empresa en la próxima década. En ella se encuentran tanto los datos más importantes para la empresa como las personas con los conocimientos necesarios para utilizarlos. Pero para liberar ese valor, necesita inversión. Se necesitan personas con conocimientos tanto de datos como de comunicación, lo que puede implicar formación y desarrollo. Se necesita un número suficiente de personas con estas nuevas competencias que puedan transmitir su aprendizaje a toda la empresa. Eso puede significar cambiar sus prioridades de contratación. Y estas personas necesitan disponer de las herramientas adecuadas: herramientas más asequibles y accesibles que nunca. A medida que avanzamos hacia 2020 y la nueva década, ahora es el momento de invertir en sus comunicadores de datos y desbloquear el valor en la oficina de finanzas.